Doce Compases Algo más que Blues

Si tuviera que escoger las tres guitarras más famosas de la historia, sin duda diría "Lucille" de B.B. King, la "Frankenstrat" de Eddie Van Halen y la "Square bodied" de Bo Diddley.
De las tres es sin duda "Lucille" la más conocida, uniendo su nombre al de su propio dueño. El binomio Lucille-B.B. king surgió en 1949, cuando King estaba tocando en un local de Arkansas. En aquella época era normal ver en estos locales bidones llenos de queroseno como método casero de calefacción. Durante la actuación dos hombres comenzaron una pelea, que acabó con el queroseno derramado y el local en llamas y evacuado. Una vez fuera King se dio cuenta de que su guitarra continuaba dentro, así que de nuevo se internó en el edificio en llamas para rescatarla, saliendo ambos ilesos. Poco después se enteró de que dos personas habían muerto en el incendio, y de que la pelea había comenzado a causa de una mujer llamada Lucille. B.B. king decidió dar ese nombre a su guitarra como recuerdo de aquella inconscienda de entrar en un edificio en llamas.
Todas sus guitarras han tenido el mismo nombre desde entonces. Aunque práctimente toda su carrera ha tocado con Gibson (ES-175, ES-330, ES-335 and ES-345 y Es-355 desde 1980) también utilizó una Fender Telecaster .
Actualmente Gibson comercializa un modelo "signature" de B.B. King, que por supuesto responde al nombre de Lucille.
Estas son las palabras con las que el maestro describe a su guitarra (de su tema Lucille):
Parece que le encanta ser mimada y tocada. También hay algo en la manera de sujetarla, los ruidos que hace, la manera que tiene de excitarme... y Lucille no quiere tocar nada que no sea Blues. Lucille es real. Cuando la toco es casi como oir palabras, y por supuesto lloros.